martes, 12 de mayo de 2009

Sara Pizzinato: "El Ministerio de Industria sigue siendo títere de las compañías eléctricas"

El Ministerio de Industria ha impuesto a Endesa e Iberdrola, gestoras de la central nuclear de Garoña, una multa de 14,5 millones de euros por ocultar una fuga radioactiva durante varios meses. Esta sentencia supone un hito histórico en la lucha antinuclear en España.
Por ello, hemos querido hablar con Sara Pizzinato, responsable de la Campaña de Transporte en Greenpeace y firme a
ctivista de la campaña "yosoyantinuclear", para analizar la situación de esta central y la postura del Gobierno ante las energías renovables.

Por Adrián Verdugo (MamáTierra en CeroPretensiones)

SaraPizzinato en laCumbre de Nairobi (2006)/ ELMUNDO


Pregunta: Tras la histórica multa impuesta a la central de Garoña, parece que la campaña antinuclear de Greenpeace cobra de nuevo protagonismo.

Respuesta: La verdad es que sí. Creo que ahora, tras esta sanción contra la energía nuclear, es un momento perfecto para retomar el debate serio y en condiciones sin mentiras por lo que pedimos a todos los españoles que saquen su ser antinuclear y que firmen en el primer registro yosoyantinuclear, que establecimos en España para que Zapatero cumpliese con su compromiso de cerrar todas las centrales nucleares en España.

P: Vosotros ya realizasteis una protesta en Garoña el 20 de noviembre de 2008, ¿cuáles fueron esos motivos?

R: El motivo es que en julio de este año el Gobierno debe decidir si alarga 10 años más la vida útil de esta central. Se trata de una decisión fundamentalmente política y por eso empezamos ya desde Greenpeace a recordar a Zapatero que prometió en dos de sus promesas electorales que empezaría por Garoña un proceso de cierre paulatino de las centrales nucleares españolas. En julio de este año Garoña no debe recibir una ampliación de su vida útil. Por ello además, pedíamos que se evitase la recarga de combustible del pasado marzo, que otorgó dos años más de vida a la central.

P: En su informe sobre los tópicos y mentiras de la energía nuclear, se dice que la central de Garoña es deficitaria. ¿Por qué se mantiene una central que es deficitaria?

R: Bueno, en realidad la central ahora no es deficitaria. La central sería deficitaria si se construyese de cero sobre un sistema eléctrico liberalizado como es el actual. Hay que recordar que esta central fue inaugurada por Franco en 1971. En aquel momento todos los ciudadanos pagaron la instalación, que es el gasto mayor de una central. Y en la actualidad, los ciudadanos pagamos los gastos de seguridad y de gestión de residuos, que son los más costosos de su funcionamiento. Quitando todo esto, las centrales nucleares gestionadas por las grandes compañías eléctricas son la gallina de los huevos de oro. Principalmente, porque se encuentran con todo pagado menos una pequeña parte que corresponde a la seguridad. Por ello, sólo se dedican a ganar dinero. Pero si las compañías eléctricas tuviesen que internalizaran todos los costes públicos, otro gallo cantaría.

P: Los defensores de las centrales nucleares se escudan en qué no producen Co2. ¿Pueden ser una solución al cambio climático?

R: Eso es rotundamente falso. Rotundamente. Primero recordar que desde los Acuerdos de Marrakech la energía nuclear ha quedado excluida de los mecanismos de desarrollo limpio de los países en vías desarrollo para luchar contra el cambio climático. Se ha comprendido que la energía nuclear no puede ser la solución al cambio climático exportable a estos países. Segundo no es cierto que no emitan Co2. No emiten Co2 durante el proceso de fisión nuclear. Eso sí para la extracción de una tonelada de uranio son necesarias 600 toneladas de minerales de uranio empobrecido, para cuya extracción y transporte se producen miles de toneladas de Co2. Así una central nuclear en todo su ciclo productivo consumiría lo mismo que una central térmica de ciclo combinado, por lo que no resultaría una solución al cambio climático. La verdadera solución son las energías renovables.

P: Entonces, ¿se puede hablar de reducción en la dependencia del petróleo?

R: No. Solamente no se frenaría la dependencia del petróleo sino que, además, tampoco se eliminaría la dependencia internacional de otros combustibles que son cien por cien importados y que resultan imprescindibles para el enriquecimiento de uranio. Porque recordemos que España no puede enriquecer uranio. Por otra parte el enriquecimiento de uranio depende de patentes japonesas y estadounidenses que, de ser retiradas, supondrían la imposibilidad de producir energía por este método.

P: En esta política de desmantelamiento de centrales, ¿ están los gobiernos español y francés buscando en el Magreb territorios para instalar las centrales nucleares?

R: Pues sí. Hay una declaración de la responsable de una de las mayores empresas de reactores nucleares francesa que viene a decir que mientras esté Sarkozy no van a necesitar comercial en la empresa, que ya se encargará él de vender la energía nuclear a todo dios. Parte de la empresa nuclear francesa que debe ser pública (en Francia la gestión nuclear es pública e íntimamente ligada al programa militar galo) busca desesperadamente dinero, porque es una industria que no sabe de dónde va a sacar todo el dinero necesario para gestionar la ingente cantidad de residuos cuando empiecen a cerrarse centrales nucleares por viejas. Por ello, necesita vender reactores nucleares a otros países. ¿A qué precio? A uno muy elevado. De este modo, muchos países en desarrollo invierten sumas enormes de dinero en falsas soluciones a los problemas energéticos.

P: Si miramos detenidamente este deseo por desarrollar las energías nucleares, llegamos al modelo de consumo de nuestra sociedad. ¿Qué cosas debe cambiar la ciudadanía para cambiar para alcanzar un modelo sostenible?

R: Hay muchas cosas que se tienen que cambiar y que se pueden cambiar. Y este es un mensaje muy positivo. Desde Greenpeace hemos realizado un estudio en el que calculábamos un escenario realista sobre cómo reducir a la mitad las emisiones del planeta para el 2050. Pero eso sí defendiendo el derecho de los países en vías de desarrollo a tener su crecimiento a costa de la reducción de demanda energética en los países industrializados, que a fin de cuentas, hemos sido los que hemos provocado el cambio climático y los que tenemos la tecnología para invertir en I+D. Además somos los que tenemos la responsabilidad para invertir esta tendencia, gracias al ahorro y a la eficiencia energética. Luego hay una parte muy importante de la aplicación de las energías renovables, cuya responsabilidad concierne a todos, desde los gobiernos a los agentes sociales. Pero tú y yo fundamentalmente, lo que deberíamos hacer es utilizar la energía de manera mucho más eficiente de la que la empleamos. Por ejemplo, con aparatos eléctricos de clase A o superior, bombillas de ahorro y usar la bicicleta o el transporte público en vez del coche.

P: ¿Cómo valora las medidas del Gobierno en materia energética y de cambio climático?

El gobierno socialista está teniendo un papel muy contradictorio en estas dos legislaturas que lleva en el poder. Por un lado, teníamos un ministerio de medio ambiente que hablaba de cambio climático por primera vez en un gobierno español. Y lo hacía de forma seria. Pero, por otro lado hay un ministerio de industria que intenta socavar cualquier iniciativa por aumentar la implantación las energías renovables en España. Así, mantiene el elevado lucro de las empresas eléctricas y un aumento de su demanda, favoreciendo que sigan ahí las centrales nucleares, que son centrales que no se pueden apagar y deben funcionar sin parar las 24 horas del día.

Por ello, se favorece el consumo, para generar una demanda que gaste toda esa sea esa razón de ser de esas centrales. En definitiva, y a pesar de lo adecuado - y necesario- de esta multa, contamos con un gobierno que habla mucho de energías renovables y eficiencia pero que, al fin y al cabo, sigue primando el carbón como fuente de producción de electricidad, la más sucia de todas. Seguimos invirtiendo en nuclear y en tecnologías que no son la solución al cambio climático, porque, a pesar de la multa, la central continúa funcionando a pleno rendimiento. Lamentablemente, el Ministerio de Industria de este gobierno sigue siendo títere de las compañías eléctricas.

[Los enlaces de esta entrevista fueron escogidos a propuesta de Sara Pizzinato]

domingo, 3 de mayo de 2009

La "criticona" conquista el centro de Madrid a golpe de pedal

Desde el 30 de abril hasta el 3 de mayo, Madrid ha sido el escenario de las distintas actividades y marchas de una especie que cada día tiene más presencia en las ciudades europeas: los ciclistas. Así, la Criticona, principal agrupación de ciclistas urbanos en Europa, pedaleó la tarde del sábado por el centro de Madrid para reivindicar su derecho a ser parte activa del tráfico.

Por Adrián Verdugo (MamáTierra en CeroPretensiones)

La masa crítica se prepara para comenzar la marcha/ Adrián Verdugo

Eran las cinco de la tarde y la Cibeles lucía menos espléndida que de costumbre, la mirada perdida, como si ya se resignase ante la visita de los miles de merengues que, según todos los medios de comunicación, se le vendrían aquella noche encima. Pero no contaba con que la Bici crítica le había preparado una sorpresa para esa tarde y, por ello, había convocado a las masas críticas de toda Europa. El fin era claro: reclamar que las "bicis" también son tráfico.

La hora de inicio de la concentración estaba prevista a las 18:00 aunque media hora antes, la acera del Ayuntamiento en su esquina con Alcalá ya lucía abarrotada. Según pasaban los minutos, más y más ciclistas surgían de todas direcciones: bajaban la Castellana, subían desde Atocha, venían desde el Retiro o salían de la estación de Banco de España con sus bicicletas a la espalda. Aunque la Cibeles estaba acostumbrada a ver a la masa crítica madrileña el último jueves de cada mes, sus ojos no daban crédito ante la cantidad de ciclistas concentrados esa tarde. Y los que todavía quedaban por llegar.

Alrededor de las 18:30 la acera del Palacio de las Telecomunicaciones se ha quedado sin un adoquín libre entre rueda y rueda y es que, según Clara, miembro de la agrupación Bici crítica de Madrid, "la cantidad de gente ha superado nuestras expectativas. No sólo hay madrileños; también han venido desde Alemania, Francia, Holanda, Italia e, incluso, desde Canadá". Por ello, quince minutos después, los agentes de movibilidad se ven obligados a intervenir en la regulación del tráfico, que ya comenzaba a verse desbordado por la concentración ciclista.

Los agentes de movilidad controlan la concentración/Adrián Verdugo

Sería en ese momento cuando los ciclistas decidiesen dar por finalizada la concentración para comenzar con la marcha por el centro de Madrid. Faltaban unos minutos para las 19:00 cuando los ciclistas comenzaron con su espectáculo. ¡Y qué espectáculo! Ver a los coches y autobuses clavados en la calzada, ante el paso de cientos de ciclistas que hacen sonar sus bocinas y timbres herederos de otros tiempos, es una sensación que no tiene precio. Me pareció que incluso la Cibeles sonreía al recordar otras tardes en blanco y negro, cuando por delante de ella desfilaban antiquísimas bicicletas de paseo hacia el Retiro.

Y si la diosa sonreía, también lo hacían los madrileños y turistas que veían entre atónitos y divertidos como las "bicis" ocupaban la Puerta de Sol y la Plaza Mayor, para volver de nuevo hacia la calle Alcalá y continuar hacia su siguiente parada. Y mientras esperábamos a que llegase todo el mundo de su expedición por el centro de la capital, Clara nos contaba emocionada "que lo mejor de todo era que esto no está preparado; que cada uno utiliza la bici para expresar algo distinto. Mientras unos lo hacen por ecología; otros simplemente tratan de dignifica un medio de transporte barato y eficaz".

De marcha por Madrid/Adrián Verdugo

La tarde pasó volando y cuando la luz comenzó a menguar, la masa crítica decidió partir de nuevo. Sólo diez minutos de pedaleo les separaban de la última parada del día: el CSO El Dragón. Así, con el ánimo como único combustible se acomodaron en sus sillines para asistir a lo que sería un cierre de fiesta muy musical: contarían con las actuaciones de La Malarazza y Cingaro Drom (audio) para amenizar la velada. Pero, hasta que llegasen al centro social, dijeron que la nota musical correría de su cuenta. Y así fue como me despidieron, cantando "no es un deporte, sino un medio de transporte" mientras yo les perdía de vista a medida que cruzaban la Puerta de Alcalá.

Clara posa para nosotros/Adrián Verdugo